martes, 17 de diciembre de 2024

Paul Watson libre: un triunfo para los defensores del océano

Paul Watson, activista medioambiental, fundador de Sea Shepherd y una de las figuras más emblemáticas en la lucha por la protección de los océanos, ha logrado este martes una importante victoria legal en Dinamarca. El Ministerio de Justicia danés anunció su decisión de no extraditarlo a Japón, país que lo acusaba de delitos vinculados a su defensa activa contra la caza ilegal de ballenas en el Océano Austral.

Este hecho no solo resalta el compromiso inquebrantable de Watson con los océanos, sino también pone en evidencia los dilemas legales y éticos que surgen en torno al activismo ambiental, la soberanía de los Estados y la defensa de la vida marina. La decisión del gobierno danés representa un momento crucial en la batalla global por los derechos del océano y las especies que lo habitan.

Detención de Paul Watson en Dinamarca

El 21 de julio de este año, Watson fue detenido en Nuuk, Groenlandia, por las autoridades danesas. Esta acción se basó en una orden de arresto emitida por Japón en 2021, aunque los hechos en cuestión se remontan a 2010, cuando Sea Shepherd se enfrentó con una flota ballenera japonesa en el Océano Austral, una zona internacional protegida como Santuario de Ballenas.

Los enfrentamientos entre Watson y la industria ballenera japonesa no son nuevos. Durante décadas, Watson ha liderado campañas para detener la caza de ballenas llevada a cabo bajo el pretexto de "investigación científica", un argumento que la Corte Internacional de Justicia declaró infundado en 2014. En 2010, Sea Shepherd desplegó operaciones directas en alta mar, interviniendo las actividades de la flota ballenera y exponiendo sus prácticas al mundo.

Japón alegó que estas acciones causaron "daños y lesiones", argumentos que sustentaron la orden de arresto. Sin embargo, resulta llamativo que dicha orden estuviera inactiva y que el proceso legal solo se reactivara más de una década después. La detención de Watson, en plena expedición de la Fundación Capitán Paul Watson, fue recibida con indignación por parte de la comunidad ambientalista internacional, quienes la consideraron un intento de criminalizar el activismo ambiental.

Rechazo a la extradición: argumentos de Dinamarca

El 1 de agosto, el gobierno japonés presentó formalmente su solicitud de extradición. No obstante, el Ministerio de Justicia danés tomó una decisión firme al rechazarla, basándose en argumentos sólidos tanto legales como éticos:

  1. La antigüedad de los hechos: Los incidentes ocurrieron hace 14 años, un período de tiempo demasiado extenso para justificar un proceso legal en la actualidad. La justicia danesa consideró que perseguir estos delitos después de tantos años resultaría desproporcionado e injusto.

  2. La prolongada detención de Watson: El Ministerio valoró el tiempo que Watson ya había pasado privado de su libertad desde su arresto en julio, argumentando que su situación debía resolverse con prontitud y respeto a los derechos humanos.

  3. La complejidad del proceso: La extradición de Watson a Japón habría implicado un proceso legal extenso, complejo y costoso, tanto para Dinamarca como para las partes involucradas.

La abogada de Watson, Julie Stage, celebró la decisión, declarando a la agencia AFP: "Está libre. El Ministerio de Justicia nos acaba de informar de que no será extraditado". La noticia fue recibida con alivio por sus seguidores y por activistas en todo el mundo que ven en Watson un símbolo de resistencia frente a las prácticas destructivas en los océanos.

¿Quién es Paul Watson y por qué es tan controvertido?

Paul Watson, de nacionalidad estadounidense-canadiense, es una figura icónica en la defensa de los mares. Fundó Sea Shepherd Conservation Society en 1977, una organización conocida por su enfoque directo y sin concesiones para proteger la vida marina. Watson ha dedicado más de cuatro décadas a enfrentar la pesca ilegal, la caza de ballenas y otras actividades que atentan contra los ecosistemas oceánicos.

La estrategia de Sea Shepherd ha sido siempre controversial. A diferencia de otras organizaciones ambientalistas que optan por el diálogo y la denuncia, Sea Shepherd se caracteriza por sus acciones directas: interceptar barcos cazadores, bloquear redes y documentar abusos en tiempo real. Estas tácticas han sido calificadas por algunos como "agresivas" o "radicales", pero para Watson, representan la única manera efectiva de proteger la vida marina cuando los Estados y organismos internacionales no actúan.

Su lema lo resume todo: "Si los océanos mueren, nosotros morimos".

A lo largo de su trayectoria, Paul Watson ha sido arrestado en varias ocasiones y ha enfrentado múltiples órdenes de captura, principalmente por presiones de países cuyas industrias pesqueras han sido afectadas por su activismo. Sin embargo, esto no ha detenido su labor ni ha mermado el impacto de Sea Shepherd, organización que ha logrado:

  • Salvar más de 5.000 ballenas en el Santuario del Océano Austral.
  • Exponer la pesca ilegal de tiburones y otras especies en regiones vulnerables como el Golfo de Guinea y el Mar de Cortez.
  • Colaborar con gobiernos y autoridades en la protección de áreas marinas protegidas.

La figura de Watson ha sido clave para la visibilidad global de estas problemáticas. Su activismo ha inspirado documentales, películas y movimientos juveniles alrededor del mundo.

Industria ballenera japonesa: un conflicto permanente

Japón ha sido históricamente uno de los países más criticados por su caza de ballenas. A pesar de la moratoria global sobre la caza comercial de ballenas implementada en 1986 por la Comisión Ballenera Internacional (CBI), Japón ha continuado con estas prácticas, amparándose en un supuesto programa de investigación científica.

Sin embargo, organizaciones ambientales y científicos han cuestionado la validez de estos programas, argumentando que la "investigación" no es más que una excusa para mantener la caza comercial encubierta. La carne de ballena sigue siendo un producto presente en el mercado japonés, a pesar de que su consumo ha disminuido considerablemente en las últimas décadas.

En 2014, la Corte Internacional de Justicia falló en contra de Japón, declarando que su programa de caza en el Océano Austral no tenía fines científicos. Aun así, el país ha continuado con sus actividades en otras regiones, generando tensiones con activistas y gobiernos defensores de la vida marina.

La intervención de Sea Shepherd en 2010 fue uno de los puntos de inflexión más importantes en este conflicto. Los enfrentamientos entre la organización y la flota ballenera japonesa no solo lograron detener temporalmente las operaciones, sino que también expusieron al mundo la realidad de estas prácticas.

Un triunfo simbólico para el activismo ambiental

La decisión del gobierno danés de no extraditar a Paul Watson no solo significa su libertad, sino también una victoria simbólica para el activismo ambiental global. En un contexto donde los activistas ambientales son cada vez más perseguidos y criminalizados, este fallo envía un mensaje claro: la defensa de la naturaleza no puede ser silenciada.

Watson, con su estilo directo y su disposición a arriesgarlo todo por los océanos, representa una voz necesaria en un mundo donde la biodiversidad marina enfrenta amenazas sin precedentes:

  • El cambio climático está acidificando y calentando los océanos, alterando ecosistemas enteros.
  • La pesca ilegal y descontrolada continúa diezmando poblaciones de peces y mamíferos marinos.
  • La contaminación plástica asfixia la vida en los mares.

En este escenario, activistas como Paul Watson juegan un papel fundamental, ya que su labor no solo detiene acciones destructivas, sino que también inspira conciencia y movilización global.

La libertad de Paul Watson en Dinamarca es un recordatorio de que la lucha por los océanos sigue vigente. La decisión de las autoridades danesas resalta la necesidad de proteger a quienes defienden nuestro planeta y plantea preguntas importantes sobre el papel de los Estados en la conservación de los bienes comunes globales, como los océanos.

Ahora, más que nunca, necesitamos unir esfuerzos para proteger los ecosistemas marinos y asegurar un futuro sostenible. Activistas como Watson han demostrado que la acción directa puede marcar la diferencia, pero esta lucha requiere del apoyo de gobiernos, instituciones, científicos y ciudadanos comprometidos.

Los océanos nos necesitan, y como diría Paul Watson: "No se trata de salvar a los océanos; se trata de salvarnos a nosotros mismos".

lunes, 16 de diciembre de 2024

Guardianes en Vivo: Viaje global con voces apasionadas por el Océano

¡Hola, queridos lectores! Hoy quiero contarles sobre una de las experiencias más emocionantes y enriquecedoras que he tenido en los últimos tiempos: la última temporada del IGTV Live Guardianes en Vivo, un espacio creado por Proyecto Acuática, que desde 2020 se ha convertido en una ventana para hablar sobre la conservación del océano y la importancia de proteger nuestros mares. Y sí, me emociona ser parte activa de la protección del océano compartiendo en cada diálogo un viaje tan increíble.

Todo comenzó hace unos meses, cuando decidimos dar un paso más allá en Guardianes en Vivo, y en lugar de centrarnos en la región, ¡expandimos el espectro! Decidimos invitar a voces del otro lado del océano. Y vaya que fue una temporada llena de aprendizajes, conversaciones e español e inglés emocionantes y, sobre todo, conexiones humanas que, más allá de las fronteras, nos unieron por el mismo propósito: cuidar y proteger nuestros océanos.

La Magia de los Invitados Internacionales

Una de las cosas que me hace sentir tan afortunado de ser parte de Guardianes en Vivo es poder compartir el espacio con expertos que están en la primera línea de la conservación marina. Y, en esta última temporada, ¡las voces que tuvimos fueron de lo más destacadas!

Primero, tuve la oportunidad de charlar con Frida Lara desde México, una bióloga marina, líder en el trabajo con tiburones y rayas y miembro de la Red MigraMar, que lleva años trabajando en la protección de los ecosistemas marinos. Su perspectiva sobre cómo los océanos están directamente conectados con el bienestar humano me dejó pensando durante días. Frida tiene una capacidad increíble para simplificar temas complejos, y fue genial escucharla hablar sobre Proyecto Tiburón y los desafíos específicos con técnicas no invasivas para proteger a los tiburones, la relevancia de la pesca artesanal sostenible y las anécdotas y experiencias en su campo. No solo es una experta, sino que su pasión por el mar es contagiosa, ¡y eso hizo que la conversación fuera aún más emocionante!

Luego, pasamos a Carlos Julio Polo de Colombia, un hombre con un corazón tan grande como el océano que defiende. Carlos es uno de esos invitados que tiene una visión holística de la conservación, reconociendo el vínculo entre las comunidades locales y el cuidado de los recursos naturales, pero también lo importante que es la gestión desde las organizaciones que fueron creadas para proteger. Durante nuestra charla, reflexionamos sobre las soluciones locales y globales que se necesitan para hacer frente a estos problemas, en especial desde la educación marina. Sin duda, una de las entrevistas más enriquecedoras.

No podía faltar una de mis favoritas de la temporada, Nicole Chinacalle de Ecuador. Nicole no solo es bióloga marina, sino también una mujer incansable que trabaja por el estudio de las especies migratorias de los ecosistemas de las Islas Galápagos, uno de los lugares más biodiversos del planeta. Hablamos sobre el impacto del turismo en áreas tan delicadas y sobre cómo los proyectos de conservación pueden equilibrar la preservación con el desarrollo. Nicole tiene una manera tan cálida de hablar sobre su trabajo que fue un verdadero placer compartir ese espacio con ella. ¡Definitivamente un ejemplo de cómo el amor por el mar puede transformar vidas!

En un giro inesperado, tuvimos la fortuna de contar con Dan Crockett, director de Blue Marine Foundation enfocado a la creación y gobernanza de las AMP, desde el Reino Unido. Dan nos condujo una charla centrada en la importancia de hacer eficaces las Áreas Marinas Protegidas (AMP), el Carbono Azul y los planes en el futuro más próximo de Blue Marine Foundation, entre otros temas. Lo interesante de su enfoque es cómo, desde Europa también se está luchando por los océanos del mundo acompañando a países verdaderamente comprometidos, entendiendo que la crisis del mar no tiene fronteras. Me sorprendió la profundidad de su conocimiento y la conexión emocional que tiene con  el krill. ¡Un verdadero apasionado del océano!

Y para cerrar con broche de oro, tuvimos a Ilco Van der Linde,  fundador de Ocean Love Foundation y los premios OIA Ocean Love Innovation Awards, desde los Países Bajos. Ilco es un experto en movimientos sociales e innovación en el mundo, pero lo que más me impresiona de él es su enfoque en soluciones e inclusión para la conservación de los océanos. Hablamos sobre cómo las ideas creativas desde las comunidades conectadas con el océano pueden contribuir con los avances en la protección de áreas marinas en peligro. Ilco tiene una visión futurista y positiva que, honestamente, me dio mucha esperanza e inspiración para el futuro de nuestros mares. 

La Conexión Global: Un Propósito Común

Lo que más me sorprendió, y lo que realmente hizo de esta temporada algo único, fue el hecho de que, a pesar de las diferencias culturales, geográficas y de contexto, todos nuestros invitados coincidían en un punto fundamental: la necesidad urgente de tomar acción y proteger nuestros océanos. Cada uno de ellos, desde su lugar en el mundo, está trabajando para mitigar el impacto humano en los mares, y eso es lo que nos conecta.

Durante cada conversación, me di cuenta de que, aunque nuestras problemáticas locales pueden variar (desde la contaminación plástica en América Latina hasta la protección del krill), la respuesta está en un trabajo colectivo. Ya sea a través de la educación, la investigación, la innovación tecnológica o el activismo, todos buscamos lo mismo: proteger la biodiversidad marina y asegurar un futuro sostenible para las próximas generaciones.

Fue increíble ver cómo cada uno de ellos compartió sus historias, su pasión, pero también las dificultades con las que se enfrentan a diario. En un mundo donde el cambio climático y la crisis ambiental parecen cada vez más imponentes, estas charlas fueron un recordatorio de que hay personas valientes luchando por un futuro mejor para nuestros océanos.

Lo que Aprendí y Cómo Me Transformó

Cada entrevista de Guardianes en Vivo es un viaje y ya llevamos 7 viajes intensos por anécdotas y conocimiento. Aprendí cosas que nunca hubiera imaginado, desde la complejidad de la conservación hasta la necesidad de soluciones innovadoras. Pero, más allá de los datos y las cifras, lo que realmente me impactó fue la determinación y el amor por el océano que compartieron todos nuestros invitados. No era solo ciencia; era pasión, compromiso y un profundo respeto por la vida marina.

Personalmente, esta temporada me ayudó a comprender cuán interconectados estamos todos. Aunque muchos de nosotros vivamos a miles de kilómetros de distancia, el océano nos une. Cada acción que tomamos para reducir nuestra huella en el mar tiene un impacto global, y las soluciones, aunque locales, son un paso hacia un cambio global.

Un Compromiso Más Firme

Después de esta nueva experiencia, no puedo más que sentirme aún más comprometida con Proyecto Acuática y la causa. Guardianes en Vivo no solo es un espacio para compartir conocimiento, sino también para inspirar a todos a actuar. Si algo quedó claro después de todas estas conversaciones es que no estamos solos en esta lucha. Hay una comunidad global de guardianes del océano que trabaja incansablemente para proteger lo que queda de nuestros mares y "necesitamos un billón de personas" para ello, como dijo Ilco.

Por eso, si aún no has visto las entrevistas, te invito a que las busques en el IGTV de Proyecto Acuática. Cada uno de los invitados dejó una huella importante en mi corazón, y sé que sus mensajes seguirán resonando. Porque el océano no es solo un lugar lejano, es nuestro, es de todos, y su conservación depende de cada uno de nosotros.  (Haz Clic aquí)

¡Nos vemos en el próximo Guardianes en Vivo!

viernes, 13 de diciembre de 2024

El ajolote: un pequeño anfibio, un gran aliado de la ciencia

Si hay un animal que podría considerarse el "superhéroe" de los laboratorios, ese es el ajolote. Este adorable anfibio mexicano, con su sonrisa permanente y su capacidad de regeneración digna de ciencia ficción, no solo nos conquista con su apariencia, sino también con las puertas que abre para la ciencia en múltiples disciplinas. Hoy quiero contarte cómo este pequeño habitante de los canales de Xochimilco se ha convertido en protagonista de experimentos en embriología, genética, ecología, biomédica, biotecnología y toxicología.

El ajolote y la magia de las células madre

Uno de los aspectos más sorprendentes del ajolote es su capacidad para regenerar tejidos dañados. Imagina que pierdes un brazo y, en lugar de quedarte con una cicatriz, tu cuerpo empieza a producir un brazo completamente nuevo. En el ajolote, este proceso ocurre gracias a la plasticidad celular: las células cercanas a la herida "retroceden" a un estado similar al de las células madre y, desde ahí, vuelven a formar tejidos.

¿Sabías que los científicos están aprovechando este fenómeno para avanzar en la medicina regenerativa? Estudiar al ajolote nos ayuda a comprender cómo inducir esa capacidad en tejidos humanos. Las células madre inducidas (iPS) son el gran ejemplo: estas son células adultas que los investigadores "reprograman" para que regresen a un estado similar al embrionario, lo que abre la puerta a reparar defectos congénitos como malformaciones desde antes del nacimiento.

Además, el ajolote también brilla como modelo para entender el desarrollo embrionario. Sus embriones grandes y transparentes permiten observar cómo las células se dividen, organizan y crean órganos. Para quienes estudiamos biología, es como tener un tutorial en vivo y en alta definición del proceso de la vida.

Descifrando los secretos de la regeneración

En el ámbito de la genética, el ajolote es una mina de oro. Su genoma, el más grande secuenciado hasta ahora en un vertebrado, está lleno de pistas sobre cómo logra hazañas que parecen sacadas de un cómic.

Por ejemplo, su capacidad para regenerar extremidades, médula espinal, corazón y hasta partes del cerebro está asociada a genes específicos. Estos genes activan procesos que los humanos no podemos realizar (al menos no todavía). Lo que los científicos están intentando es descifrar cómo se regula esta capacidad y qué podemos aprender para aplicarla en medicina, desde regenerar tejidos quemados hasta desarrollar tratamientos para lesiones cardíacas.

Y aquí viene lo más interesante: ¡todo esto también tiene implicaciones en el estudio del cáncer! Los ajolotes son mucho menos propensos a desarrollar tumores, y entender cómo controlan el ciclo celular puede darnos claves para combatir el crecimiento descontrolado de células en los humanos.

Guardianes de los ecosistemas

Aunque el ajolote es famoso por sus habilidades regenerativas, no podemos olvidar su rol ecológico. Como especie endémica de los lagos de Xochimilco y Chalco, es un bioindicador clave de la salud de estos ecosistemas. Si los ajolotes están en problemas, sabemos que el ambiente lo está también.

Por desgracia, la urbanización y la contaminación han reducido drásticamente sus poblaciones. Pero la buena noticia es que su conservación está inspirando proyectos de restauración de hábitats, como la construcción de refugios artificiales y la limpieza de los canales de Xochimilco.

Además, el ajolote se ha convertido en un símbolo de conservación en México, una especie bandera que nos recuerda la importancia de proteger la biodiversidad local.

Si el ajolote puede regenerar extremidades completas sin cicatrices, ¿podríamos algún día lograr lo mismo en humanos? Esta es una de las grandes preguntas en la biomedicina. Su capacidad para crear nuevos tejidos y órganos es un modelo perfecto para entender cómo podríamos tratar lesiones graves, como daños en la médula espinal o el corazón, y hasta enfermedades neurodegenerativas.

Uno de los enfoques más prometedores es el estudio del blastema, una estructura celular que aparece durante la regeneración. En los ajolotes, el blastema es como una fábrica de tejidos nuevos. Analizar sus mecanismos nos está llevando a desarrollar terapias que podrían ayudar a regenerar extremidades humanas en el futuro.

Pero eso no es todo. Los ajolotes también son resistentes a condiciones de hipoxia, es decir, bajos niveles de oxígeno. Esto los convierte en modelos ideales para estudiar lesiones isquémicas, como las causadas por infartos o accidentes cerebrovasculares, y encontrar nuevas terapias para prevenir daños permanentes.

El ajolote no solo inspira avances médicos; también tiene aplicaciones en biotecnología ambiental. Por ejemplo, como bioindicador, su biología puede ayudarnos a desarrollar microorganismos que limpien cuerpos de agua contaminados, un proceso conocido como biorremediación.

Y, para garantizar su preservación, los científicos están explorando técnicas como la clonación y el almacenamiento criogénico de embriones. La idea es que estas herramientas no solo nos ayuden a salvar al ajolote, sino que también se apliquen para conservar otras especies en peligro de extinción.

Por último, pero no menos importante, el ajolote es un excelente modelo para estudiar toxicología. Su sensibilidad a los contaminantes químicos lo convierte en un indicador natural de la calidad del agua.

Además, su sistema nervioso ha sido fundamental para evaluar cómo las neurotoxinas afectan el desarrollo y funcionamiento del cerebro. Esto no solo nos ayuda a entender los impactos de sustancias como pesticidas y metales pesados, sino que también abre puertas para desarrollar terapias que mitiguen los daños causados por estas toxinas en los humanos.

El ajolote y el futuro de la ciencia

El ajolote no es solo un anfibio con superpoderes; es una ventana al futuro de la ciencia. Desde la medicina regenerativa hasta la conservación ambiental, este pequeño habitante de los lagos mexicanos sigue demostrando que el conocimiento no tiene fronteras.

Si algo me queda claro después de explorar todo lo que este animal puede enseñarnos es que necesitamos protegerlo, no solo por lo que representa para los ecosistemas, sino también por su invaluable contribución a la ciencia. Así que, la próxima vez que veas un ajolote, recuerda que estás mirando a un verdadero héroe de laboratorio y un símbolo de esperanza para un mundo mejor.

¿Qué te parece este fascinante animal? ¿Te gustaría aprender más sobre él? ¡Déjamelo saber en los comentarios! 🌿💡

viernes, 6 de diciembre de 2024

Charlas El Océano: conectando el conocimiento del océano y la vida desde cualquier rincón del mundo

Cuando comenzó Charlas El Océano, nunca imaginé hasta dónde nos llevaría esta aventura. Lo que empezó como un espacio para compartir el amor por el océano, hoy se ha convertido en un puente que conecta a estudiantes de todo el mundo con la inmensidad y la magia del agua, sin importar si están en un salón de clases en Puerto Rico o frente a una pantalla en España.

El asombro de aprender juntos, cara a cara

Hay algo mágico en la energía de un salón lleno de estudiantes curiosos. En nuestras sesiones presenciales, he visto cómo sus ojos se iluminan cuando hablamos de las ballenas jorobadas o cuando explicamos la importancia de los manglares. Cada pregunta que hacen, cada dato que descubren, es un recordatorio de por qué hacemos esto: despertar su curiosidad y plantar esa semilla de amor y respeto por el océano.

Lo mejor es que estas charlas no son una clase tradicional. Son conversaciones, momentos en los que compartimos y aprendemos juntos. ¡Y qué decir de los juegos y dinámicas! Me encanta cuando un estudiante conecta los puntos entre lo que ve en su día a día y lo que le contamos sobre el océano. Es como si encendiéramos una chispa en sus mentes.

El océano cruza fronteras: historias desde Andalucía

Pero Charlas El Océano no solo se queda en las aulas físicas. Gracias a la tecnología, hemos llegado a estudiantes como María Ortiz, una joven increíble desde Andalucía, España. María es un ejemplo de cómo las charlas online pueden ir más allá del océano. Con ella hemos explorado especies de agua dulce como el ajolote, ese fascinante ser que parece salido de un cuento de fantasía. Juntos hemos aprendido cómo su vida está conectada con el océano y cómo, al entender estas relaciones, abrazamos el principio fundamental: toda la vida en el planeta está interconectada.

Lo más interesante es que, a través de estas charlas, los estudiantes no solo entienden al océano como un ecosistema lejano, sino como una parte vital de sus propias vidas, incluso si no tienen una playa cerca. María, por ejemplo, ahora habla con pasión de cómo proteger el ajolote, aunque sea una especie endémica de México y lejos de su casa, sabe que es también una manera de cuidar el océano. Y eso, créanme, es un logro gigantesco.

2025: una ola que promete llegar más lejos

El próximo año viene cargado de proyectos emocionantes. Estoy emocionada por seguir promoviendo la cultura oceánica desde edades tempranas. Tenemos ideas para llevar este mensaje aún más lejos: queremos que la ola de conocimiento y amor por el océano llegue a cada rincón, desde salones de clases hasta pequeños talleres comunitarios.

La idea es simple pero poderosa: si los niños crecen entendiendo la importancia del océano, serán adultos que lo protegerán con el alma. Vamos a explorar nuevas formas de enseñar, crear materiales interactivos y, por qué no, soñar con un futuro donde la alfabetización oceánica sea tan común como aprender el abecedario.

Un mensaje para todos: el océano nos conecta

Si algo me ha enseñado Charlas El Océano, el programa de educación marina de Proyecto Acuática, es que el amor por el océano no tiene fronteras. Desde las aguas profundas hasta los ríos y lagunas, la vida siempre nos recuerda que estamos todos conectados. Cada charla es una oportunidad para inspirar, aprender y, sobre todo, recordar que el océano es vida.

Así que si estás leyendo esto y sientes curiosidad, te invito a que te unas a esta ola. Ya sea desde un salón en Barranquilla o desde tu rincón del mundo, juntos podemos explorar, descubrir y proteger el océano, nuestra gran casa azul. 🌊


Programa de Educación Marina de Proyecto Acuática

Paul Watson libre: un triunfo para los defensores del océano

Paul Watson, activista medioambiental, fundador de Sea Shepherd y una de las figuras más emblemáticas en la lucha por la protección de los ...